José Thomas, Director General De Escuelas De Mendoza - Bogotá, Colombia
¡Hola y muchas gracias a todos los presentes! Pero antes de que empiecen a saludar, quiero agradecer especialmente a Isolda y Abedu. En Mendoza, nos inspiraron en el 2019 con lo que sucedió en el norte de Brasil. Gracias a ellos, hoy estamos aquí. Pero no vengo a dar las gracias convencionales, ¿quién necesita cuatro minutos de saludos? ¡Adelante!
Hoy quiero destacar algo que nos movilizó profundamente. No en el 2019, ni en el 2020, sino en el año 2000. Sí, retrocedamos en el tiempo. Hubo una catástrofe anunciada: niños pasaban tres años en el sistema educativo sin aprender. ¿Y saben qué dijo? Que el problema no eran los insumos, sino la política educativa. Cambiemos el enfoque, no son los ingredientes de la torta, sino cómo la cocinamos. ¡Brillante!
Nuestra gestión, que comenzó hace tres años y medio, se enfocó en seis ejes claros. ¿El primero? Disminuir la brecha. El segundo, la alfabetización. Porque, ¿qué educación puedes tener sin derecho a leer? Innovación pedagógica, docentes comprometidos, evaluación constante y un uso eficiente de los recursos. Pero ojo, no para gastar menos, ¡sino para que más chicos aprendan con lo que tenemos!
Y entonces, en marzo del 2020, cerramos las escuelas. ¿Locura? No, simplemente nos aferramos a nuestros ejes. La pandemia no desvió nuestro plan. ¡Aplausos para el equipo! Pero, ¿qué ocurrió después? En marzo del 2021, tomamos una decisión audaz. Decidimos escuchar leer a cien por ciento de los chicos de Mendoza. ¡Queríamos saber si leían! Y descubrimos que, después de tres años, los resultados no eran tan locos. Pero aquí viene lo bueno.
Realizamos un censo, escuchamos leer a 30,000 chicos de tercer grado. ¿El resultado? El 60% en niveles bajos de fluidez lectora, y un porcentaje significativo en niveles críticos. ¡Alarma! Pero no nos quedamos de brazos cruzados. Implementamos siete políticas remediales, enfocadas en los chicos en niveles críticos. Teníamos datos, sabíamos dónde estaban y nos lanzamos. Jornadas extendidas, apoyo de los municipios, ¡y hasta les pido que levanten la mano para mantenerse despiertos! ¡Eso aprendí de un gran educador argentino!
Después de siete meses de intervención, reducimos los chicos críticos al 12%. ¿Magia? No, estrategia, datos, y acción dirigida. Pero recordemos una frase: "Pesár la vaca no la engorda". La política entre la primera pesada y la última es lo que importa. No es solo el censo, sino la acción basada en evidencia, neurociencia y resultados diarios.
Así que, en resumen, ¡gracias, gracias por escucharme y aprender juntos a hacer las cosas mejor! ¡Aplausos!